Escribir, cantar y dibujar. Y no necesariamente por ese orden. Son los tres pilares de la vida artística de la sevillana Raquel Díaz Reguera (1974), que cuando se vio ‘abandonada’ por la música y ‘recibida’ por la maternidad descubrió un mundo que le pareció fascinador: el del álbum ilustrado. Venía de una década dedicada a la música como letrista y de un fugaz disco de éxito con su hermana Nuria con la que formó el dúo Maldeamores (2000). Su primer álbum de ilustraciones, fue un intento de persuadir a su hija Violeta para que abandonara la idea de querer ser una princesa. Cuatro años después, ‘¿Hay algo más aburrido que ser una princesa rosa?’ (2010) va ya por su sexta edición, ha sido traducido en tres idiomas y se ha convertido en material de referencia en coeducación. Solo fue el principio. Entre 2010 y 2014 ha publicado 22 títulos y su cabeza está en continua ebullición. Le encanta inventariar las cosas y famosos son sus catálogos de madres, abuelas y besos. El último, ‘Amor y punto’. Porque los puntos y seguido son la continua cadencia de su vida..