José Fernández, jamón al natural que pone sabor al mercado internacional

José Fernández tomó el testigo de su padre y es el gerente de Jamones de Juviles, una empresa familiar que tiene sus orígenes en 1930 de la mano de su abuelo. Actualmente exportan jamón a varios países de Europa, además de a Japón y a Rusia. Recientemente han iniciado también su distribución en Canadá. Distribuyen anualmente unas 100.000 piezas en sus instalaciones en el municipio granadino de Juviles, en la Alpujarra.

Javier Peña, moldes de materiales plásticos que dan forma al éxito empresarial

A Javier Peña le correspondió, junto a su hermano, Fran Peña, tomar las riendas de la empresa familiar, Matricería Peña. Su padre, José Peña, la fundó en 1975 en el municipio granadino de Íllora, después de volver de Barcelona, a donde emigró. Con 43 años, Javier es director gerente de una de las tres únicas empresas en España que se dedican a la fabricación de moldes para la extrusión de materiales plásticos. Sus clientes están repartidos por el territorio español, y también en Marruecos, Argelia, Bélgica, Francia y Turquía. Cada semana crean varios productos nuevos, diferentes, y esta es una de sus mayores satisfacciones al frente de la empresa.

Juan José Díaz, patentes tecnológicas para el diagnóstico del cáncer a bajo coste

Juan José Díaz Mochón estudió Farmacia en Granada. Descubrió su pasión por la investigación y ésta le llevó al Reino Unido. Primero a Southampton, después a Edimburgo. Allí, de una idea, de una patente, surgió una spin-off, DestiNA Genomics. Cuando Juan José volvió a Granada gracias a un contrato del programa ‘Ramón y Cajal’, consiguió que el centro de I + D de su empresa se ubicara en el Parque Tecnológico de la Salud. Se dedican a la fabricación de kits de diagnóstico de enfermedades como el cáncer y cuentan con patentes por varios continentes.

Tomiko Tanaka, abriendo camino a empresas andaluzas en Japón con la cata de aceite como pasión

Tomiko Tanaka trabajaba para una gran multinacional en Tokio. Esta japonesa, licenciada en marketing, tenía entonces una prometedora carrera como comercial en su país. Sin embargo, víctima de un estrés acuciante, decidió apostar por cambiar radicalmente de vida. Su destino, Sevilla. Llegó para aprender español, pero  pronto encontró en Andalucía su gran pasión: el aceite de oliva. Hoy es una experta catadora de este producto. Como consultora comercial, asesora a empresas andaluzas que quieren introducirse en el mercado nipón.